Destacan regulación y beneficios para proyectos de energía no convencionales
Este paso permitirá que el Gobierno siga consolidando su política pública de atraer inversiones y diversificar la matriz en el 2022 menos dependiente de la energía generada a través del agua (hidronergía). A mayo de 2020, según XM, el 63.66% de la generación del país fue producto de recursos renovables y el 36.34% restante de recursos no renovables. En la generación total con recursos renovables, la mayor contribución fue la generación hidráulica con un 98.37 %
Esta semana el presidente Iván Duque dijo que en próximos años aspiran a llegar a un 12% con un aporte de otras energías de recursos no convencionales renovables para consolidar la “transición energética que es una realidad".
“En 2024 aspiramos a tener esa matriz consolidada más cuando los fenómenos de la Niña y Niño son cada vez más fuerte. Pasamos de un 0,5% energía solar y eólica, y en un año logramos triplicar esos 50 megavatios a más de 150%, y a tener más opciones para que el sector privado participe y llegar a 2.500 megavatios", agregó Duque.
El Decreto 829 de junio 10 de 2020 dado a conocer por el Gobierno permitirá que también pequeños inversionistas de energías fotovoltaicas puedan acceder a los beneficios.
Incentivar la penetración de las fuentes no convencionales de energía, principalmente aquellas de carácter renovable en el sistema energético colombiano, la eficiencia energética y la respuesta de la demanda en todos los sectores y actividades, con criterios de sostenibilidad medioambiental, social y económica, estaban paralizadas hasta antes del decreto, según expertos consultados por EL HERALDO.
Ahora la norma permite que la Upme tenga la facultad de conceptuar qué empresas pueden acceder a esos estímulos, facultad que hasta antes del decreto estaba en un limbo y también tenía trámite ante la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
“Los beneficios no se ampliaron con el decreto. Y no es que la Anla pierda su esencia. La Upme ahora entrega el concepto de estímulo y beneficios tributario. Se facilitan los procesos. Esto es importante porque desde noviembre pasado no se sabía cómo acceder a la reducción del IVA y aranceles”, explica Germán Corredor, presidente de SER Colombia, gremio de la Asociación de Energías Renovables.
Manuel de la Ossa, empresario y desarrollador de inversiones en energía solar en la Región Caribe, analizó que resultaba “inadmisible que pequeños y medianos auto generadores potenciales de energías renovables, como la solar fotovoltaica, definidos por la citada norma como aquellas personas naturales o jurídicas cuya potencia máxima no supera el límite de 1.000 KW establecido por la UPME, aún no hayan podido tener acceso, de manera expedita, a los beneficios e incentivos de las fuentes renovables de energía”.
“Desde el año 2015 y durante los últimos cinco años, este hecho había generado gran incertidumbre entre cientos de miles de usuarios de la región Caribe, los cuales ante la actual coyuntura energética, hoy seguían soluciones de energía limpia de rápida instalación, a precios cada vez más competitivos”, agregó de la Ossa.
Víctor Tamayo, representante de Ventus, destacó que los cambios que señala el decreto son el de ordenar y reglamentar para reducir trámites ante una autoridad como la Anla. “Se va directamente a la Upme quien queda como certificador de energía”.
Para el representante de esta compañía que tiene oficinas en Uruguay y desarrolla proyectos en Colombia en energía eólica, esto debe acelerar las inversiones. “Motiva y se deben reducir los tiempos. Tenemos desarrollos en La Guajira, Córdoba y Meta en eólico y solares”.
Para Germán Corredor se acelerará el proceso de inversiones. “Se destrabarán una buena cantidad de procesos. Los beneficios tributarios son los que hacen posible que los proyectos sean rentables”.
“Solo nos resta esperar que las decisiones hoy tomadas en virtud de la promulgación del Decreto 829/2020, con fuerza de ley, se conviertan en un verdadero camino expedito para los incentivos y en la priorización de los 5 retos fundamentales para una real transformación energética en la región: democratización, diversificación, descentralización, descarbonización y digitalización”, dijo Manuel de la Ossa.
Fuente:
elheraldo