Paneles solares, la apuesta limpia de las universidades regionales
La Universidad de Antioquia, como parte de su estrategia de sostenibilidad, desarrolló un sistema de integración energética que incorpora paneles solares y que fue presentado en los últimos días.
Aunque apenas se encuentra en fase de evaluación, ya es funcional y actualmente abastece totalmente a un laboratorio de Ingeniería Ambiental y, parcialmente, al bloque 28 de la Ciudad Universitaria.
El ahorro mensual es de $240.000 en facturas de electricidad y, según los cálculos de los desarrolladores, podría suplir por completo los requerimientos energéticos de una casa estrato cuatro.
¿Por qué es novedoso?
De acuerdo con Edwin García, director del Grupo de Investigación en Materiales y Sistemas Energéticos (Tesla), que lidera el proyecto, los páneles instalados en la U. de A. cuentan con una tecnología pionera en el país.
“Nosotros les incorporamos un elemento conocido como tracking de doble eje, que les permite a los paneles seguir al sol en las dos direcciones”, dijo.
Sobre su funcionamiento, el ingenierio metalúrgico Héctor Sánchez, quien también hace parte del proyecto, puntualizó: “Es un brazo robótico que acomoda el panel de acuerdo con la ubicación del sol para aumentar su recepción de energía. Dependiendo de la hora y las condiciones climatológicas, ubicar el panel en un ángulo determinado puede ser más beneficioso”.
Además, según Sánchez, en la ciudad no se cuenta con datos del potencial real que tiene la instalación de este tipo de paneles con movimiento, por lo que este es otro de los principales aportes de la U. de A.
“Con esta instalación podremos validar esta tecnología aplicada a nuestro entorno y grado de nubosidad específico, entendiendo que este difiere en todos los puntos del mundo”, aclaró.
Según lo exponen los investigadores, la teoría que se ha establecido respecto a esta tecnología indica que el gasto energético que hace el brazo para mover el panel es superior al beneficio que puede respresentar el seguimiento del sol. Sin embargo, ellos esperan derribar este paradigma con la nueva instalación.
Revisión a distancia
El desarrollo del Grupo Tesla va más allá del sistema de seguimiento de la luz solar. El equipo liderado por García creó una plataforma en la que pueden consultar el estado de los paneles de manera remota.
“La plataforma muestra, según la radiación solar y las condiciones climatológicas, informa cuánta energía está generando el panel frente a su potencial máximo; señala el porcentaje que se está perdiendo, para que, sin necesidad de ir hasta allá, decidamos si es necesario enviar a alguien a revisarlo”, concluye.
La U. de A. también instaló el sistema en su sede de Robledo y se plantea llevarlo a las de Apartadó y Caucasia. En el desarrollo del proyecto. también participan estudiantes
En octubre de 2013, la universidad incursionó en el uso de paneles fotovoltáicos. Fueron instalados 20 en la terraza del bloque 10 en el campus de Laureles.
Seis instalaciones adicionales han beneficiado al bloque de parqueaderos, al de ingenierías y al proyecto de vivienda sostenible Casa Hábitat, generando un ahorro total que supera los 90 millones de pesos, entre 2013 y 2019. De acuerdo con el docente investigador Gabriel López, quien ha apoyado la incorporación de esta tecnología en la UPB, el impacto que han tenido los paneles en la reducción de emisiones de Dióxido de Carbono (CO2) de la universidad es significativo.
“La energía generada equivale a la siembre de 1.700 árboles en el campus y, en términos de emisiones de CO2, correspondería a dejar de generar 66 toneladas”, concluyó.
La Bolivariana hace parte del programa Energética 2030, proyecto en el que participan universidades locales (incluida EIA) y empresas del sector eléctrico que apuntan a la transición a fuentes de energía renovables para el año 2030.
ALIANZAS POTENCIAN INSTALACIÓN DE PANELES EN LA EIA
A partir de convenios con empresas privadas de los sectores de construcción y energía, la Universidad EIA busca ampliar la capacidad de sus instalaciones fotovoltáicas. En 2016, Conconcreto trajo la primera dotación de paneles al campus, los cuales fueron ubicados en el centro de innovación que la empresa inauguró en esa universidad. Según lo expuso el docente investigador Santiago Ortega, este puede suministrar energía a otras dependencias en caso de generar excedentes. Además, tras la evaluación positiva de la primera instalación, la EIA firmó un nuevo acuerdo, esta vez con Celsia, con el que espera incorporar una estructura solar 13 veces más potente que la primera, y que podría cubrir una quinta parte de la energía requerida por la institución. Los convenios de poder de compra, que es la figura bajo el cual la institución ha traído esta tecnología a su sede, responsabilizan a las empresas externas de la instalación y mantenimiento de los paneles. A cambio, ellas tienen derecho a cobrar la energía que generen. “Si bien no es un ahorro tan grande como si la universidad los instalara, representa una ganancia”, dijo Ortega
Fuente:
El Colombiano