Sales fundidas para reconvertir las termoeléctricas a carbón de Chile en plantas sostenibles
El reciente anuncio por parte del Gobierno de Chile de eliminar el carbón de la matriz eléctrica para 2040 trae consigo una serie de desafíos para la industria, ya sea en el sistema de transmisión para llevar más energías renovables a los centros de consumo; y otro fundamental es el destino de las actuales centrales a carbón y su aporte en generación base.
En este contexto, el Programa de Energía de la Asociación Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ), junto con la Agencia Aeroespacial Alemana (DLR), están planteando a las generadoras e instituciones del sector eléctrico la implementación de una tecnología innovadora, que utiliza sales fundidas para la reconversión de las actuales centrales termoeléctricas a carbón.
Rainer Schröer, director de este programa de la GIZ, explica que “esta tecnología, integra estanques de sales fundidas, como en las plantas de concentración solar de potencia (CSP), a la infraestructura de las termoeléctricas que dejarán de operar, abriendo con esto una nueva alternativa para la descarbonización de la matriz”.
Esta solución se denomina “Batería Carnot” y fue presentada como una de las alternativas en la Mesa de Descarbonización del Ministerio de Energía. “Ahora estamos en conversaciones con algunas empresas para apoyar un piloto en Chile de estas nuevas centrales térmicas, para el almacenamiento de energía renovable”, comenta Schröer.
En abril de este año y gracias a una invitación de GIZ, el Dr. Michael Geyer, senior advisor para el desarrollo de proyectos de energía solar y almacenamiento de DLR, estuvo en Chile y presentó esta tecnología ante diferentes entidades y empresas.
Fuente:
PV Magazine